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Foto del escritorAndre Casagrande

El Tren en Curacautín: desde el clásico al ochentero


Andar en tren (Andar en tren) Es de lo mejor (Es de lo mejor) Se tira del cordel (Se tira del cordel) Y se para el tren (Y se para el tren)
El inspector (El inspector) Se enojará (Se enojará) Y mandará (Y mandará) A bajar del tren (A bajar del tren)

¡Que memorables tiempos era viajar en el tren! Ese lugar donde recorrerlo valía la pena, no como ahora.


Pero... ¿Cómo se originó?


Durante el Gobierno del Presidente Balmaceda se crearon varias obras públicas, una de ellas era el ferrocarril, la cual llenaba el orgullo de los chilenos, lo que no se supo es que por la revolución de 1891, se paralizaron dichas obras. Entre ellas, estaba nuestro querido tren curacautinense que empezaría en Pua (Victoria) y culminaría en Lonquimay, pero solo llegó hasta Selva Oscura, lo cual afecto a la economía de la zona, sobre todo en la madera.


Pero, sería en 1919 cuando el tren volvería a ser el rey, llegando a la Piedra de Reunión a inicios del Siglo XX y se trasformaría en el principal medio de transporte de la Piedra de Reunión en sus años.


Y esto cambiaría sus papeles con la llegada del Túnel de Las Raíces, dicho proyecto buscaba ser parte de un proyecto de un segundo tren transandino que uniese Lebú (Región del Bio Bio) a Bahía Blanca (Argentina) y permitiese agrandar los fines económicos en la zona. Esto se concretaría en la década de los 30. De ahí nacería el progreso en Lonquimay, su ciudad vecina.


Pero, el proyecto no logró a concretarse, dejando la ruta de tren hasta Lonquimay, el resto historia conocida.


Sin embargo, el popular tren no se quedó por detrás y permitió la llegada de turistas que iban entre Pua a Malalcahuello. Aunque en la década de los 80 en adelante esto se disminuiría con la construcción y pavimentación de los caminos desde Lautaro y desde Victoria a la Piedra de Reunión, los cuales eran más fáciles y más asequibles que irse en un tren.


Y no sería hasta mediados de los 90 cuando el tren desaparecería de a poco, el famoso proyecto del Tren de la Araucanía se masificaba de a poco algo que compartimos en Facebook y que me gustaría volver a compartir:


En fin, luego de su desuso, las piezas fueron sacadas de a poco quedando puros vestigios fuera. La ruta entre Malalcahuello a Manzanar terminó siendo una ciclovía y desconozco su existencia debido a la construcción de la nueva ruta del Camino Internacional que está en obras. La Estación de Curacautín fue demolida para ser el nuevo Terminal de Buses, del cual fue parte de ello, la de Manzanar terminó siendo un abandono total y la de Malalcahuello ahora es la biblioteca de esa localidad.


En fin, así fue, el tren de la Piedra de Reunión ya es historia... y lo es.


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